El láser CO2 fraccionado es una excelente técnica de tratamiento de rejuvenecimiento facial, como también para combatir cicatrices, marcas y estrías, entre otras alteraciones de la piel.

​

¿Qué es el Láser CO2 Fraccionado?

​

Se trata de un láser molecular que realiza un trabajo de sinergia con dióxido de carbono y una fuente de calor (láser diodo o radiofrecuencia). En la clínica utilizamos CO2 ablativo fraccional y cuentan con una  longitud de onda de 10,660 nm, la que puede ser asimilada por el agua que contienen los tejidos.

​

Durante la aplicación, la energía pulsada que emite este láser calienta el agua hasta llegar a su punto de ebullición, generando así la vaporización de las capas superficiales de piel. Debido a esto comienza el proceso de regeneración natural del cuerpo que da lugar a una piel nueva y sin lesiones.

​

Conjuntamente, el calor brindado por el láser de CO2 tiene la capacidad de estimular las capas más profundas de tejido, en donde se encuentran los fibroblastos, estimulándolos para conseguir la generación y reordenamiento de las fibras de colágeno. 

​

Los equipos de láser CO2 fraccionado emiten minúsculos haces de energía, con un diámetro microscópico, bien separados unos de otros. Estos micro haces penetran en la piel formando columnas, y entre ellas queda tejido sano, permitiendo una respuesta de curación mucho más rápida del tejido y una considerable reducción de los efectos secundarios.

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

 

 

 

​

​

​

​

​

​

Las microheridas causadas por el láser de CO2 fraccionado hacen de punto de partida para el proceso de cicatrización y reconstrucción, de modo que la piel sana reemplaza a la dañada consiguiendo una reepitelialización total en poco tiempo.

 

Cabe destacar que la energía es emitida en pulsos cortos con alta tasa de repetición, facilitando el calentamiento controlado de los tejidos sin llegar a carbonizarlos.

​

A diferencia de los viejos equipos de láser de CO2, los de la actualidad no causan un enrojecimiento prolongado, no provocan cambios de pigmentación, no tienen riesgo de infecciones y ofrecen mejores resultados.

​

Usos del láser de CO2 fraccionado

​

Todo depende de la potencia en la que se utilice el equipo, pero puede emplearse para estos fines:

• Vaporizar las capas superficiales de la piel.

• Cortar tejido.

 

La vaporización del tejido básicamente es una exfoliación controlada y precisa de las capas superficiales de la piel. Durante este proceso la energía láser penetra el tejido en forma de columnas rodeadas de piel sana, y las moléculas de agua que contiene absorben la longitud de onda coagulándose.

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

 

 

 

 

 

 

 

La vaporización con láser de CO2 fraccionado se emplea para el tratamiento estético de:

• Manchas.

• Verrugas.

• Ojeras de color marrón.

• Arrugas finas, medias y profundas.

• Rejuvenecimiento facial.

• Cicatrices atróficas.

• Envejecimiento cutáneo.

• Estrías.

• Cicatrices de acné.

• Cicatrices hipertróficas y queloides.

• Poros dilatados.

• Manchas de la piel.

• Fotoenvejecimiento.

 

Es importante recalcar que el corte de tejido mediante láser de CO2 es exclusivamente de empleo médico, una esteticista no puede realizar dichas labores, pero a modo informativo se emplea para conseguir un efecto ablativo coagulando los vasos sanguíneos y linfáticos para impedir que se produzca una hemorragia.

​

​

 

Beneficios del láser de CO2 en tratamientos de dermatología estética

​

• Se obtiene una piel revitalizada y luminosa.

• Al eliminar manchas y rojeces ayuda a conseguir la uniformidad del tono.

• Se reducen notablemente las arrugas finas.

• Genera el deseado efecto tensor sin tener que recurrir a un lifting quirúrgico.

 

Los primeros resultados notorios a los días de efectuada la sesión con láser de CO2 es el suavizado de las manchas (o su eliminación dependiendo el caso) y una notable mejoría en el estado general de la piel. El resto de los objetivos se obtienen pasados unos 6 meses, que es cuando el colágeno ha conseguido formarse.

Los efectos del tratamiento con láser CO2 fraccionado duran años, pero están supeditados al proceso de envejecimiento natural de la persona como de los cuidados que le brinde a su piel y el tipo de hábitos de vida que posea.

​

Sesiones con láser de CO2 fraccionado

​

Por lo general se requieren de 1 a 6 sesiones (según el caso) para conseguir resultados, y puede generar molestias, sobre todo en las zonas más sensibles.

​

La duración del procedimiento es de unos pocos minutos, obviamente a mayor superficie a tratar, más tiempo de aplicación.

​

La piel se ve ligeramente enrojecida durante las primeras horas posteriores a la aplicación, y conforme pasan los días se torna amarronada. Este color desaparece a los 4 o 5 días, dando lugar a una piel completamente renovada.

 

Contraindicaciones del láser de CO2 fraccionado

​

Se puede emplear laser de CO2 fraccionado en todo tipo de pieles, pero no en casos de:

• Procesos infecciosos.

• Embarazo y lactancia.

• Cáncer.

• Alteraciones de la coagulación.

• Epilepsia.

• Cuadro febril.

• Condiciones debilitantes.

 

Usos frecuentes en dermatología estética del láser de CO2 fraccionado

​

El láser de CO2 fraccionado puede aplicarse en toda la superficie del rostro, escote, cuello, dorso de las manos, pecho, muslos, glúteos, alrededor de la boca, ojos y párpados. 

​

​

Acude primero con tu dermatóloga: Dra. Cristina Cortés para la valoración de tu caso y programarte en caso de ser candidato a este tratamiento.

​

​

​

​